Este periódico escolar nace como una aventura en la que un grupo de alumnos y de profesores quieren explorar las posibilidades de las herramientas de comunicación que existen en Internet. Está abierto a la colaboración de alumnos y profesores de nuestro Instituto.
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jueves, 3 de abril de 2008

Sigue tu sueño

Sigue tu sueño

Violeta es una jovencita de 16 años, es bailarina. Baila en el conservatorio de Madrid, pero ella es de Málaga. Su vida es muy interesante, y algo triste.

1er capítulo

Violeta nació en Málaga, su familia era muy reducida pues ella era la única hija. Era una niña muy bonita, con el pelo castaño oscuro como su padre. Los ojos los tenía muy grandes y con tonos violetas, de ahí sus padres decidieron su nombre. Tenía una cara misteriosa y linda que hasta iluminaba al sol. Sus padres, Raquel y Ricardo trabajaban como profesores en un colegio cerca de casa.

Cuando Violeta nació las cosas cambiaron y fueron apareciendo algunos problemas en el matrimonio. A los dos años del nacimiento de la niña, se divorciaron. Violeta se quedó con su madre, pues de Ricardo no se supo nada más.

Cuando Violeta cumplió cinco años, su madre la apuntó al colegio. Ella se sentía muy orgullosa.

-mamá, ¿crees que haré muchos amigos?-le preguntaba la niña por el camino hacia la escuela.

-Claro que si cariño.-le contesto su madre.

- y, ¿crees que seré una buena estudiante?-preguntó Celeste algo preocupada.

-Por supuesto, y yo te apoyaré mucho.-afirmó Raquel con seguridad.

Las dos siguieron andando y por fin llegaron. Violeta se esperaba algo más grandioso, divertido y bonito, como ella veía en las películas que su madre alquilaba los fines de semana.

-Adiós mamá.

-un beso cielo ¡pásatelo bien!

2º capítulo

Cuando Violeta entró en la clase, vio a veinte cuatro niños y niñas de su misma estatura. Cuando iba a sentarse una voz cursi y femenina decía:

-¡Hola! ¿Cómo te llamas?

-Soy Violeta, ¿y tu?

-¿Violeta? ¡ qué nombre más feo!

-pues ¿veamos el tuyo?

-soy Margarita

-¡no le eches cuenta Violeta! Soy Paula, sentémonos en un pupitre y dejemos a esta tonta aquí.

Margarita se fue enfadada, mientras que Paula y Violeta empezaron a conocerse, desde entonces fueron amigas inseparables.

3er capitulo

Violeta cada tarde después de hacer los deberes iba a jugar con Paula al parque, pero algunas veces se aburría. Entonces su madre decidió apuntarla a alguna actividad extraescolar. A Violeta le encantaba la danza clásica, cada vez que veía algún ballet se quedaba embobada. Sus interpretaciones preferidas eran``EL LAGO DE LOS CISNES´´ y ´´GISELLE``.

Su madre decidió apuntarla a una academia no muy lejos de casa.

El primer día violeta estaba bastante nerviosa y le daba vergüenza. Pero a la vez sentía curiosidad y muchas ganas de aprender a bailar.

Cuando entró vio una clase de paredes color salmón claro, una profesora delgada y guapa vestida de negro y unas niñas de su edad con un maillot blanco, como el que le había comprado mamá. La verdad es que ella se esperaba un gran escenario lleno de personas importantes (entre ellas mamá), dispuestas a ver un gran ballet, como los que salían en la televisión. Cuando entró todo el mundo le sonrió amablemente menos una persona.

La profesora Estefanía no le sonrió como las demás niñas, solo le digo que se apoyara en la barra e intentara seguir a sus compañeras.

Estefanía era seria y estricta solo quería la perfección. Pero a Violeta no le salían los pasos pues era el primer día, pero a pesar de ello, parecía que la profesora no lo tenía en cuenta. A Violeta no le caía bien. Aunque violeta no se sentía tan mal porque había niñas muy buenas en la clase. La que más le gustaba se llamaba Anne, una chica inglesa que bailaba bastante bien.

Al salir de la clase Anne la preguntó a Violeta:

-Hola, ¿qué tal tu primer día?

-bueno…

-tranquila, yo me sentía igual mi primer día y no me gustaba la profesora. ¿y a ti?

- no mucho -dijo Violeta algo triste

-eso es porque no la conoces, ella en su vida cotidiana no es así, es que las profesoras de ballet tienen que ser así.

Entonces Violeta vio a su madre y salió disparada.

-adiós Anne encantada de conocerte

-igualmente Violeta.

4º capítulo

Violeta permaneció en la academia unos tres años, ya era medio bailarina le decía Estefanía, que como decía Anne cuando la conocías mejor, era un cielo de profesora. Violeta se convirtió en unas de las mejores de la academia y bailaba en escenarios, pero no venían personas importantes, sino personas conocidas por las chicas y chicos que bailaban. Como siempre iban a verla mamá, Paula y la madre de Paula.

Sus mejores amigas eran Paula y Anne, pero ella también tenía muy buenos amigos. Era privilegiada porque tenía amigos en la academia y en el colegio. Ella se sentía demasiado feliz, pero las cosas no le fueron así.

Pues su madre últimamente salía mucho de casa.

5º capítulo

Un día después del colegio Raquel estaba sentada en el sofá esperando a Violeta, pero esta vez no estaba sola, ni con la madre de Paula.¡estaba con un hombre! Violeta no se lo podía creer.

Cuando su madre habló con ella, Violeta se fue llorando a su habitación, y enseguida llamó a Paula y a Anne.

Se lo contó todo a sus amigas y cuando estas se enteraron se dirigieron a la casa de Violeta rápidamente.

Entraron las dos amigas en la casa y se sentaron en el salón las cinco personas. Entonces aquel hombre desconocido empezó a hablar:

-como sabéis, la madre de Violeta me a hablado mucho de su hija. Así que, sin pensármelo dos veces, decidí ir a ver a Violeta a la academia .Como Raquel me comentó, Violeta puede llegar a ser una gran bailarina, pero eso si tiene un buen apoyo. Entonces hemos decidido Estefanía, Raquel y yo que deberías venirte al conservatorio de danza de Madrid. Allí podrás aprender más, con un nivel mas avanzado.

Las tres niñas empezaron a llorar pues solo se verían en verano.

Violeta dedicó esa semana a despedirse de sus amigos y principalmente de su profesora:

-gracias por haberme enseñado todo lo que sé.

-gracias a ti, por haber sido la mejor alumna que he tenido, te echaré de menos.

Violeta se fue a Madrid con el amigo de su madre, allí aprendió mucho. Los veranos se trasladaba a Málaga con mamá y sus amigas.

También en el conservatorio hizo buenos amigos.

Desde entonces esta allí día tras día, semana tras semana, año tras año, luchando por su sueño. Pues la danza es algo muy sacrificado, aunque a la hora de verlo, parece un bonito cuento de hadas.

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FIN